“Cena de amigos”, la última novela de José María Conget cuenta las historias de tres matrimonios sevillanos, todos prácticamente en crisis, que realizan quedadas para cenar en casa de uno o de otro. Se conocen de toda la vida por distintos motivos. Además, suelen invitar a un hombre soltero. El primer matrimonio es el formado por Eugenio (profesor y poeta excelsamente premiado, que trabaja en Madrid como asesor de una editorial) y Luisalú, traductora. Tienen un hijo, Rodion, periodista trabajando para varios medios y que vive independizado. El segundo matrimonio es el formado por Jorge y Caspia. El es un escritor de bestseller con bastante fama y ella tuvo una tienda de antigüedades. Tienen una hija, Clara, con problemas emocionales que se refugia en su habitación. El último matrimonio está formado por Sergio, gestor cultural de una entidad financiera y Roberta, que con una prima han abierto una boutique. Tiene un hijo Alfredo, que quiere ser guionista, pero que no está muy preparado. A las cenas también acude Mendo, un periodista cultural, que realiza reseñas en medios y vive con su madre.
Los maridos de los matrimonios y Mendo trabajan todos en el mundillo literario y/o cultural y se han ido haciendo favores unos a otros.
La historia transcurre en Sevilla, en la época en que se desarrollaron las acampadas del 15M, esto es, en 2012. Rodion junto a su compañero de piso Julian colaborar con los acampados en “Las Setas” (así llaman a la Plaza de la Encarnación de Sevilla). Allí Rodion conoce a una chica, Vita, inician una relación que se convierte en la trama principal de la novela.
El principal tema de la novela es el conflicto entre padres e hijos, la falta de comunicación que en algún caso llega al enfrentamiento. La crisis de los tres matrimonios, que prácticamente ya están rotos, por falta de confianza y de cariño, por deslealtad, el alcohol, etc. La relación llena de obstáculos entre dos personas de diferentes clases sociales: Rodion (clase alta) y Vita, que organiza la acampada en las Setas. Se ven falsos amigos, que solo se arriman por intereses económicos o por intercambio de favores.
Varios personajes se dedican a temas literarios, artísticos o al cine, y esto da mucho juego para hacer referencias: Rodion es el nombre del protagonista de “Crimen y Castigo”, Mendo colecciona tebeos, el poeta Pablo Neruda, Aquiles, un famoso premio literario, el propio autor se autorreferencia, etc.
Me ha resultado la novela. Está muy bien estructurada. Además, va acompañada de una trama que crea un ambiente de tensión, especialmente en las últimas páginas y que engancha. Está escrita de una manera indirecta, es decir, todo es narración y no hay diálogos empezando con guiones. A pesar de esto la lectura es muy fluida y está muy bien escrita. Recomiendo su lectura.
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